Hoy en día, la ventana es uno de los elementos arquitectónicos que otorga más personalidad a una casa o edificio. A la hora de instalar una ventana se ha de tener en cuenta la actividad que se desarrollará en cada espacio, así como el tipo de elementos que se sitúan a su alrededor.
Existen varios tipos de ventanas según su apertura, siendo el modelo oscilobatiente el más completo.
Desde HOCO te explicamos en qué consisten cada una de ellas, pudiendo optar siempre por una combinación entre ellas:
La ventana practicable
La ventana practicable, también denominada batiente, es la que consta de una o varias hojas con dos puntos de anclaje en uno de los laterales de las mismas, con una apertura izquierda o derecha, generalmente hacia el interior del edificio o casa, y pudiendo girar 180°. Es la ventana más demandada puesto que es cómoda para limpiar su parte exterior y no necesita de un gran mantenimiento.
Su principal ventaja es la apertura total del hueco, lo que implica una gran ventilación del espacio.
La ventana oscilobatiente
Cada vez son más los clientes que acuden a nuestros distribuidores en busca de la ventana oscilobatiente. Se trata de un modelo que no solamente se abre como una hoja practicable de estilo tradicional con sus 180°, sino que también es capaz de abrirse ligeramente en la parte superior de manera vertical aproximadamente 45°.
Para que conozcas más sobre esta ventana, vamos a presentarte todas las ventajas que ofrece dentro del hogar o de la oficina:
Ventajas clave del modelo de ventana oscilobatiente
– Estas ventanas permiten elegir la clase de apertura que deseas en cada momento. Si solamente quieres airear un poco la habitación o prefieres abrirla totalmente, para que entre el frescor de la calle.
– Son realmente fáciles de usar. Bastará con hacer un giro de la manilla para modificar la forma de apertura. Además, son modelos muy seguros, ya que los niños encontrarán dificultad a la hora de poder abrirlas, teniendo la posibilidad añadida de incorporar manillas con llave de seguridad.
– Se trata de un tipo de ventana que ofrece un importante aislamiento acústico y térmico. Conserva la temperatura interior y consigue un importante ahorro de energía y, por tanto, económico. Un ahorro que también tendrá su consiguiente repercusión en una mejor protección del medio ambiente.
– Permiten una infinidad de acabados diferentes. Poseen una amplia posibilidad de personalización de colores y pueden diseñarse en toda clase de tamaños. Por ello, son perfectas para cualquier espacio, tanto profesional como privado.
– Su mantenimiento y limpieza son muy sencillos. Al abrirse de diferentes formas, no tendrás que dejar ni un solo espacio sin limpiar.
– Ahorran espacio y aportan una mayor comodidad. Como pueden abrirse ligeramente, son perfectas para los espacios pequeños. Además, son ideales en las ventanas con cortinas, pues no has de retirarlas para poder abrirlas.
La ventana oscilobatiente es una interesante alternativa si estás buscando versatilidad para tu oficina u hogar.
La ventana oscilante
Es una ventana que se abre oscilando desde su eje superior o inferior 45°, de la misma manera que se abre la ventana oscilobatiente en su posición oscilo. Su mayor ventaja es que ocupa poco espacio y se puede utilizar en lugares donde hay un espacio reducido, como puede ser un cuarto de baño y no es posible abrir una hoja de 180°, siendo necesaria una ventilación del habitáculo.
La ventana o puerta corredera
La gran ventaja de una ventana o puerta corredera es que permite infinidad de posibilidades arquitectónicas tales como separar una estancia permitiendo la entrada de luz y dando sensación de transparencia y amplitud.
Podemos encontrar tres tipos de correderas:
- Ventana o puerta corredera simple:
Para su composición es necesaria un mínimo de dos hojas, que proporcionan la apertura total de uno de los huecos mediante un raíl que superpone una hoja sobre la otra de manera horizontal. Está indicada para espacios donde no es posible la apertura por obstáculos.
Para este tipo de sistema hay que tener en cuenta dos aspectos: que sólo deja apertura en una parte del hueco y que un sistema de railes proporciona un ajuste menos hermético.
- Puerta Corredera Elevadora.
Consiste en que, en el momento del desplazamiento de la hoja, ésta se eleva mediante un sistema que soporta la hoja y que permite el desplazamiento de la misma sin esfuerzo, evitando fricciones en los rodamientos.
Mediante este sistema, se da la posibilidad de enterrar el marco inferior para eliminar así cualquier tipo de barrera arquitectónica, siendo la opción perfecta para una casa adaptada a personas con movilidad reducida.
Mientras la hoja se encuentra en posición abierta no se da contacto de la junta con el marco, por lo que permite una aireación controlada. Proporciona además un fuerte aislamiento tanto térmico, acústico y hermético, así como un gran sistema de seguridad, siendo una de las ventanas más completas.
- Puerta Corredera Osciloparalela
La puerta corredera osciloparalela combina un sistema de cierre como el de la ventana oscilobatiente con el sistema corredera, por lo que las ventajas que se otorgan a este modelo son muy completas: su cierre a presión hacen de ella la perfecta opción para el aislamiento térmico y acústico, así como a la permeabilidad del aire. Además, posee unas características de seguridad excepcionales al tener la posibilidad de aumentar los puntos de cierre de la misma.
Una de las grandes posibilidades de la puerta corredera osciloparalela, es que su raíl se puede prolongar hacia la pared contigua de la ventana, por lo que la apertura del hueco es total y no se ve limitada por ninguna hoja siendo la apertura mucho más amplia.
Hemos podido ver que las posibilidades que te ofrecen las ventanas de PVC HOCO son muy extensas. Es ahora el momento de analizarlo con tranquilidad y consultar con tu Experto HOCO, quien valorará tu proyecto de forma personalizada y te dará la solución más adecuada a tu hogar.
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