Cuando se decide elegir una ventana, además de considerar los materiales, es crucial tomar en cuenta el tipo de apertura que se adapte a las necesidades específicas. Aunque la elección final depende del espacio disponible, la ubicación de la ventana, su uso y accesibilidad, existen múltiples opciones disponibles. En el articulo de hoy, revisaremos algunas cuestiones basicas de las aberturas corredizas y estaremos profundizando en uno de los tipos más populares, la ventana corredera 3 hojas.
Ventana corredera 3 hojas: bases para comprenderlas
Los tipos de apertura de ventanas se dividen en dos categorías principales: sistemas practicables, que se abren girando sobre un eje, y sistemas deslizantes, también conocidos como ventanas correderas.
En este caso, nos concentraremos en las ventanas correderas. Exploraremos los distintos tipos de ventanas deslizantes, sus características y sus ventajas y desventajas.
Ventanas de apertura deslizante o correderas
Los sistemas de apertura deslizante, también llamados ventanas correderas, se desplazan a lo largo de una guía ubicada en la parte inferior del marco. Los sistemas de apertura deslizante que veremos a continuación comparten ventajas y desventajas.
Ventajas: estas ventanas son ideales para espacios reducidos donde no se puede instalar una hoja practicable debido a obstáculos como columnas o áreas estrechas de paso. Además, permiten la incorporación de sistemas de protección externa como mosquiteras o toldos, el uso de alféizares para plantas o la instalación de tendederos.
Desventajas: requieren un espacio mínimo para su instalación, lo que significa que al deslizar una de las hojas, debe quedar un hueco suficiente para el paso. La zona central, donde se unen los marcos de ambas hojas, es más ancha, dificultando la entrada de luz. Limpiarlas implica sacar las hojas del marco. Además, no ofrecen el mismo nivel de aislamiento que las ventanas practicables, aunque los modelos más recientes se acercan en rendimiento.
Tipos de ventanas correderas
- Ventana corredera: el modelo más básico, las hojas se deslizan sobre el marco inferior. Pueden tener un mínimo de dos hojas, aunque su cantidad varía según el tamaño del espacio disponible.
- Ventana corredera oscilo-paralela: combina el sistema de deslizamiento con la capacidad de inclinar la hoja hacia adentro ligeramente, dejando un pequeño espacio en la parte superior. Ofrece mayor seguridad al permitir la ventilación sin riesgos de caídas, especialmente en áreas con niños.
- Ventana corredera elevadora: en este caso, la hoja se levanta mientras se desliza, logrando un movimiento más suave. Recomendada para ventanas grandes que puedan ser más pesadas.
- Ventana corredera plegable: usualmente se ve en puertas para terrazas y jardines. Se emplea en huecos grandes, y las hojas se pliegan como un acordeón, agrupándose en un lateral de la abertura.
- Ventana corredera vertical o de guillotina: este sistema es común en casas antiguas. Implica dos hojas que se desplazan verticalmente a lo largo de guías laterales. Normalmente, la hoja inferior se levanta para abrir la ventana. Estos sistemas de apertura pueden combinarse en ventanas combinadas, fusionando sistemas practicables y deslizantes para obtener una solución personalizada.
Variantes de la ventana corredera 3 hojas
- Ventana corredera 3 hojas de aluminio: estas son altamente solicitadas debido a su robustez, durabilidad y facilidad de mantenimiento. Además, presentan una amplia gama de colores y acabados. Son especialmente adecuadas para hogares con un enfoque decorativo moderno.
- Ventanas correderas de pvc: estas tienen similitudes notables con las de aluminio, si bien suelen ofrecer un precio más asequible. Resultan idóneas para viviendas con una decoración minimalista.
- Ventana corredera 3 hojas de madera: estas versiones son más clásicas y, aunque requieren un mayor nivel de cuidado, aportan un toque distinguido y acogedor a la estética del hogar.
Aspectos relevantes al adquirir una ventana corredera 3 hojas
- Dimensión: resulta esencial que la ventana se adecue a las necesidades y al espacio disponible.
- Seguridad: las ventanas deben incorporar sistemas de seguridad para prevenir posibles intrusos o robos.
- Aislamiento térmico y acústico: una ventana de calidad debe garantizar un aislamiento efectivo del ruido y de las variaciones de temperatura en el interior del hogar.
- Calidad del cristal: es fundamental que el vidrio sea resistente, permita una buena transmisión de luz y ofrezca la capacidad de regular la radiación solar.
- Eficiencia energética: es necesario asegurarse de que la ventana contribuya al ahorro energético, reduciendo así los costos de climatización del hogar.
Aprender a elegir una ventana corredera 3 hojas de calidad
Al seleccionar una ventana corredera, estás tomando decisiones que afectarán directamente al confort en el interior de tu hogar. Es esencial prestar una atención especial a la calidad de estos productos, ya que en el mercado existen variados materiales y opciones para evaluar. Aquí te presentamos cómo hacerlo:
Evalúa la transmitancia térmica u (busca valores más bajos)
Este indicador mide la cantidad de calor que atraviesa la ventana. Opta por ventanas con valores alrededor de 1,8 w/m²k, ya que superan a muchas ventanas abatibles y correderas en términos de eficiencia. Estos valores son perfectamente alcanzables a precios razonables.
Considera la clase de permeabilidad al aire
Este aspecto se relaciona con la hermeticidad de la ventana. Aunque siempre será menos efectiva que una ventana abatible de alta calidad, existen opciones de ventanas correderas en el mercado que ofrecen una hermeticidad competitiva. Opta por productos con clasificación de al menos clase 3 y notarás una diferencia significativa en comparación con correderas de clases inferiores.
Navega por nuestro catálogo de ventanas y elige el sistema de apertura que mejor se ajuste a tus necesidades, o incluso una combinación de ellos. Nuestro equipo está disponible para brindarte asesoramiento en caso de dudas, y ayudarte a escoger la mejor ventana corredera 3 hojas para tu hogar.