A muchas personas el concepto de Casas Pasivas (Passivhaus) les resultará novedoso, aunque nació allá por los años 80 en Estados Unidos y creció en Alemania en los 90, cuando ya era patente la necesidad de conseguir modelos constructivos denominados “de consumo de energía casi nulo”.
Simplificando, una casa pasiva es aquella vivienda eficiente que reduce al máximo la demanda energética asegurando un confort interior máximo.
Qué se tiene en cuenta a la hora de diseñar y construir una casa pasiva
Los factores determinantes para tener en cuenta a la hora de diseñar las casas pasivas son:
- Ubicación
- Diseño arquitectónico
- Orientación
Y los factores que a su vez determinan los anteriores para un aprovechamiento máximo de los recursos son:
- Temperatura climatológica
- Humedad
- Radiación solar
- Viento
Una estrategia de diseño global que tenga en cuenta todo lo anterior combinada con el uso de determinados sistemas mecánicos dará lugar a una casa pasiva de alta eficiencia que alcanzará enormes ahorros en el consumo energético y reducirá considerablemente el impacto ambiental.
Los 6 principios básicos de una casa pasiva
Para alcanzar esa alta eficiencia energética exigida y afectar lo mínimo posible al impacto ambiental, las casas pasivas han de cumplir estos seis principios en su construcción:
- Utilización de materiales de construcción no tóxicos y respetuosos con el medioambiente, avalados por declaraciones ambientales.
- Alcanzar un elevado aislamiento térmico en la envolvente del edificio, suelos, muros y cubiertas, gracias a los materiales de construcción utilizados y a las capas aislantes añadidas.
- Estanqueidad y hermeticidad al aire, sin fugas ni corrientes de aire incontroladas. Esta condición se comprueba durante el proceso de la obra mediante una prueba Blower Door, una prueba que evalúa el nivel de permeabilidad del edificio.
- Rotura de puentes térmicos, que son las zonas situadas en la envolvente donde se producen diferencias de temperatura indeseadas, como juntas, esquinas, paredes, techos… Los puentes térmicos representan aproximadamente una pérdida entre el 10% y el 20% del calor total.
- Uso de ventanas y puertas de altas prestaciones, con triple vidrio bajo emisivo para reflejar el calor al interior de la vivienda en invierno y mantenerlo en el exterior durante el verano.
- Sistemas de ventilación con recuperación de calor (VMC: ventilación mecánica controlada), que permiten ventilar recuperando aproximadamente el 90% de la energía del propio inmueble, por lo que no hace falta abrir las ventanas y el aire que entra se climatiza con el aire que sale. Este sistema de ventilación ha de combinarse con un sistema de calefacción eficiente como la bomba de calor, estufa de biomasa, energía geotérmica…
¿Es cara una casa pasiva?
A medida que la tecnología ha ido avanzando, el precio de una passivhaus ha ido reduciéndose, de modo que en la actualidad el sobrecoste de este tipo de viviendas no debe exceder entre un 5% y un 25% del precio de una vivienda tradicional.
Los materiales y espesores para utilizar variarán en función del clima y la orientación. Puede utilizarse cualquier sistema constructivo: estructura de hormigón, acero, ladrillo, madera… y se admiten infinidad de tipos de acabados, pero siempre con materiales de origen sostenible y respetando las condiciones climáticas y geográficas para preservar el entorno. Es muy importante poner especial interés en una adecuada ejecución.
Existe una certificación Passivhaus que puede obtenerse a través del Passivhaus Institute de Alemania, y existen casas prefabricadas que la ostentan.
Las viviendas pasivas son tendencia y el futuro de los hogares y las ciudades. Aprovechan la energía con la ayuda de la tecnología con el objetivo de proteger el planeta y hacer frente al desafío del cambio climático, reducen un 90% el consumo energético respecto a una casa normal, sin necesidad de realizar prácticamente ningún aporte energético (consumo casi nulo), funcionando casi independientemente de la red eléctrica o al margen de ella, por lo que son menos vulnerable a los incrementos del coste de la electricidad, y por tanto a medio plazo, constituyen un ahorro no solo para el planeta sino también para el bolsillo.
El papel de HOCO en una casa pasiva
La ventana juega un papel primordial en el concepto de casas pasivas, puesto que es un punto primordial en su concepción.
HOCO participa con asiduidad en construcciones pasivas para ofrecer una solución en el cerramiento de este tipo de arquitecturas sostenibles y los resultados son realmente positivos. La temperatura interior se mantiene constante, las ventanas apenas se abren puesto que el sistema de ventilación es regenerador, y gracias a la propia estructura arquitectónica, apenas es necesaria la energía en refrigeración/calefacción.
En la localidad de Elche (Alicante) encontramos un ejemplo con Casa Vona, donde las ventanas HOCO de PVC forman parte del cerramiento de la casa. En esta ocasión se optó por un cerramiento de color gris antracita foliado para imprimir ese carácter moderno a la arquitectura de la casa.
¿Estás valorando un proyecto de casa pasiva? HOCO desarrolla tu proyecto de renovación de ventanas de forma gratuita y sin compromiso para que tú también puedas mejorar tu vivienda y acercarla lo máximo posible al concepto de casa pasiva.